Verano en los ríos subbéticos.

     En verano, los ríos subbéticos que, principalmente, abastecen al Genil y al Guadajoz, contribuyen a mantener la reserva hídrica de la comarca, pero además, constituyen islas de vida para gran parte de la fauna de la subbética.

En esta entrada, recopilaré una serie de imágenes que, por un lado, puedan describir como es la vida en un río cuando llega el periodo estival y por otro lado, conciencien de la importancia vital que tiene para todos los seres vivos el mantener estos entornos limpios, sin contaminación, haciendo además un uso responsable de nuestros recursos hídricos.

                         Martín pescador (Alcedo atthis)

   Este precioso y espectacular pajarillo podemos encontrarlo en algunos de nuestros arroyos, riachuelos y humedales donde el agua tiene una mínima calidad. Se alimenta fundamentalmente de pequeños peces que captura lanzándose en picado desde un posadero, capturándolos con su fuerte y afilado pico. También se alimenta de insectos acuáticos, renacuajos, anfibios, crustáceos y moluscos de río. Su vuelo es espectacular, muy rápido y pegado al agua casi siempre.

Lavandera cascadeña (Motacilla cinerea)  

Esta ave es muy habitual en arroyos o riachuelos, teniendo preferencia por merodear en zonas donde el agua transcurre rápida. Es un ave insectívora que se puede ver durante todo el año. Se caracteriza por ser un pájaro muy "nervioso" cuando está posado, con movimientos rápidos de cola hacia arriba y abajo. Este pajarito, al igual que los demás animales insectívoros, es fundamental para el control de plagas y la reducción de focos de insectos nocivos.

 Ánade real hembra (Anas platyrhynchos)

El ánade real o pato azulón es, según los censos de "Seo birdlife", la anátida más común de la península ibérica. Muestra preferencia por aguas poco profundas, característica de muchos de los ríos que en verano mantienen caudal en nuestra subbética cordobesa. Es un animal omnívoro que prefiere comer plantas acuáticas, pero también incluye en su dieta, al igual que el anterior pajarillo, los insectos, en este caso de mayor porte como, por ejemplo, libélulas.

Esta bonita pata bajaba cada día, acompañada de sus patitos, por el curso del río donde la he fotografiado, probablemente, desde donde tiene el nido hacia donde se alimenta. Sólo pude fotografiarla con calidad a ella. Al ser un pato salvaje está muy atenta y desconfiada y ante movimientos o sonidos, rápidamente, los pollos se esconden detrás de la vegetación mientras ella hace de avanzadilla comprobando si hay peligro o no.

Galápago leproso (Mauremys leprosa)

Uno de los habituales de nuestros ríos subbéticos, embalses y zonas húmedas, es el galápago leproso. Éste, que he fotografiado, es una cría y se encontraba en un tramo de río bastante contaminado y con poca agua. El galápago leproso constituye un tipo de tortuga con una gran adaptabilidad, resistente a la contaminación y a la reciente invasión por parte las tortugas que suelen comprarse en tiendas de animales (galápago de Florida). Cuando éstas últimas crecen o ya no se las quiere tener en casa, son abandonadas en ríos, complicando el futuro de nuestra fauna autóctona.
Éste es un animal omnívoro prefiriendo los alimentos de origen animal. Pueden llegar a cazar pequeños peces, tritones ranas y renacuajos, pero la mayor parte del alimento la obtienen recorriendo el fondo o recogiendo pequeños animales que caen al agua y flotan en la superficie. También devoran carroña, plantas acuáticas, insectos, etc Tal y como se ve, durante el día, a estas tortugas de agua les gusta retozar encima de piedras o troncos para secarse y regular su temperatura. Ante el menor peligro, rápidamente se sumergen y mimetizan.
Por suerte, parece que ya no está tan de moda coger a estos pequeños animales y llevarlos a casa

 Rana común (Pelophylax perezi)

La rana común es un anfibio fácil de observar en nuestros ríos subbéticos. Es una especie, al igual que el galápago leproso, muy adaptable y poco exigente a la hora de seleccionar el hábitat. Esta rana concretamente, es vecina de la anterior tortuga.
La rana común es el anfibio más abundante en los ríos, arroyos, lagunas y albercas pudiendo soportar importantes grados de contaminación orgánica y salinidad. La rana común se alimenta de insectos, moluscos, lombrices, etc. Cuando van creciendo consumen presas de mayor tamaño, llegando a comer en algunos casos; pequeños reptiles, mamíferos e incluso aves. También son caníbales. Generalmente las ranas cazan al acecho, situadas en los bordes del agua y saltando sobre sus presas, aunque también pueden buscar activamente su alimento en tierra.

Zarza (Rubus fruticosus)

Se trata de una planta arbustiva espinosa de la familia de las rosáceas que podemos encontrar en todos los ríos y arroyos de la subbética. Vive en el interior de bosques o en sus bordes, en arroyos y suelos húmedos llegando a formar zarzales impenetrables. Son muchas las veces en las que, después de intentar entrar a un riachuelo por algún hueco dejado por esta planta, he salido con brazos y piernas totalmente arañadas gracias a sus espinas. En esta aventura por los ríos subbéticos he podido comprobar como esta planta sirve de refugio a gran número de pajarillos y roedores. También, constituye una plataforma donde estos mismos animalitos pueden beber agua sin tener que salir a "río abierto", con el peligro que ésto supone para ellos.
El fruto de esta planta es una baya roja o negra conocida como mora o zarzamora. Sin duda, una sabrosa recompensa después de estar un buen rato escondido intentando fotografiar a algún animal descuidado.

Curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala)  

Aquí se puede a esta curruca cabecinegra en el momento del baño, una vez ha saciado su sed. Este bonito pajarillo me servirá como ejemplo para ilustrar a esa gran cantidad de aves que utilizan nuestros ríos para calmar la sed durante el caluroso verano y para, al mismo tiempo, reparar su plumaje. Verderón, verdecillo, escribanos, mirlo, currucas, herrerillo, carbonero, trepador, pico picapinos, paloma torcaz, tórtola europea, roquero solitario, jilguero, chorlitejo chico, estornino, pardillo y un largo etc. son pájaros que he podido ver y fotografiar en muchos casos durante el momento en el que han bajado al río a beber agua.

Huellas de turón (mustela putorius)

Los ríos subbéticos son frecuentados por todo tipo de mamíferos. No es nada fácil verlos pues la mayoría son de hábitos nocturnos o se mueven preferentemente , como ya digo, por la noche.
Una forma de poder identificar a un animal es por sus huellas. No siempre es fácil pero con una buena guía y con horas de campo se puede llegar a dominar esta forma de identificación.
En las orillas de los ríos subbéticos he visto diferentes tipos de huellas de mamíferos (además de aves, evidentemente), en muchos casos de zorro y jabalí. En esta ocasión pongo lo que parecen huellas de turón (es atrevido decantarse por uno), mamífero carnívoro de mediano tamaño y de la familia de los mustélidos. Bien podrían ser también de garduña (muy parecida al turón pero con babero blanco) porque el tamaño y la huella de ambos son muy similares, pero el turón muestra mayor preferencia por las zonas boscosas próximas al agua que es donde tomé la foto (que conste que este criterio no es cien por cien válido en este caso para asegurar que la huella es de uno u otro animal).
Uno de los retos que me he propuesto en esta aventura por los ríos subbéticos es la de fotografiar a alguno de los mamíferos que merodean por nuestros ríos (jabalí, zorro, comadreja, tejón, garduña, gineta, turón, meloncillo, lirón, nutria, etc.). ¡A ver si lo consigo!

 Culebra viperina (Natrix maura) 

De gustos acuáticos, esta pequeña serpiente, habita en las orillas y riberas de charcas y ríos subbéticos. Se alimenta de las presas que encuentra bajo el agua, sobre todo renacuajos, peces y ranas. En el tramo de río donde la fotografié había una gran cantidad de renacuajos de rana común en sus últimas fases. La viperina contribuye a regular la población de anfibios de nuestras zonas húmedas y ríos. Siempre está cerca del agua por lo que no es posible encontrarla en zonas secas.
Esta culebra no es venenosa y adoptará una postura defensiva imitando el ataque de las víboras si se la molesta, silbando y lanzándose hacia adelante aplanando la cabeza. Emite un olor desagradable o vomita para ahuyentar a posibles depredadores. Nunca muerde.
Me vienen a la mente las numerosas culebras que se ven muertas en caminos, vía verde y carreteras. Prácticamente todas las culebras que podemos encontrar en la subbética son inofensivas para el hombre. No son venenosas. Por el contrario, contribuyen de manera muy eficaz a controlar las poblaciones de, por ejemplo, roedores.
En la primera foto se puede ver a la Viperina perfectamente camuflada en la atalaya desde donde atacará a los peces o ranas que nadan debajo de ella.
En la segunda foto se puede ver como otra Natrix maura, igualmente, estaba muy bien mimetizada, debajo de una rama ya dentro del agua.
Aunque no está particularmente amenazada, su supervivencia depende de la calidad de los ecosistemas acuáticos por lo que aprovecho para recordar que los ríos subbéticos no gozan de una especial buena salud. En nuestra mano está contribuir a la recuperación de los mismos.

Restos de un acuífero (probablemente época califal)

Cangrejo de río ibérico (Austropotamobius pallipes)